La Segunda Barrera: El Gradiente Excesivo
Hacer algo en gradiente es abordarlo gradualmente, paso a paso, nivel por nivel, con cada paso o nivel siendo fácilmente asequible, de modo que, finalmente, las actividades complicadas o difíciles se pueden realizar con relativa facilidad. El término
Cuando uno tropieza con un gradiente excesivo al estudiar un tema, se produce una especie de confusión o tambaleo (un estado de vacilación o de falta de estabilidad mental). Esta es la segunda barrera al estudio.
El remedio para la barrera del gradiente excesivo es disminuir el gradiente. Averigua cuándo la persona no estaba confundida acerca de lo que estaba estudiando, y entonces descubre qué nueva acción emprendió. Encuentra lo que él cree haber entendido bien, justo antes de confundirse totalmente.
Descubrirás que hay algo en esta área, en la parte que él creyó que había comprendido bien, que en realidad no comprendió.
Cuando esto se aclara, el estudiante podrá seguir avanzando.
Cuando se encuentra que una persona está tremendamente confundida en la segunda acción, que se suponía que tenía que saber o hacer, es seguro suponer que en realidad nunca comprendió la primera acción.
Esta barrera es más evidente y se aplica más en actividades que conlleven acción, en contraposición al puro estudio académico o intelectual.
Un gradiente es una aproximación gradual a algo, tomada paso a paso, nivel a nivel; siendo cada paso o nivel, en sí mismo, fácil de alcanzar, de manera que al final, actividades complicadas y difíciles puedan llevarse a cabo con relativa facilidad. El término gradiente también se usa para designar cada uno de los pasos que se dan siguiendo ese enfoque .