Las Fórmulas de las Condiciones de Ética fluyen, una tras otra, yendo el primer paso de una fórmula justo a continuación del paso final de la fórmula anterior.

Pero, ¿qué haces si la gráfica de tu estadística te indica que has subido una condición antes de que ni siquiera hayas tenido la oportunidad de terminar la fórmula? ¿Te limitas a dejar esa fórmula y a comenzar con la siguiente? La respuesta es “No”. Uno termina la fórmula que ha empezado.

Este es un ejemplo. Al examinar sus estadísticas, un Director Ejecutivo ve que están en Emergencia. Inmediatamente se asegura de que se empiece el paso “Promociona” de la Fórmula de Emergencia. Una vez que está bajo control, empieza a “Cambiar su forma de actuar”. Hace que, mientras siguen haciendo su trabajo, se hagan acciones de capacitación con algunos miembros de su personal de ventas e introduce tres personas más en una de sus principales áreas de producción.

Pero antes de que tenga oportunidad de hacer cada uno de los pasos restantes de la Fórmula de Emergencia, las estadísticas de ingreso y entrega suben a Funcionamiento Normal.

¿Qué hace? Bueno, ahora está en una Condición de Normal según las estadísticas. Pero la Fórmula de Normal también haría que terminara la Fórmula de Emergencia, porque en la Fórmula de Normal abandonas lo que no tiene éxito e insistes enérgicamente en lo que tuvo éxito; lo que tuvo éxito aquí fue la Fórmula de Emergencia. Por lo tanto, este Director Ejecutivo puede tener una mejora continua en la gráfica terminando la Fórmula de Emergencia pues las acciones de la Fórmula de Emergencia son las que lo llevaron a Normal tan rápidamente. Así que él insistiría enérgicamente en realizarlas hasta que estuvieran totalmente terminadas. Esto no significa que todavía esté en una Condición de Emergencia: ahora las estadísticas están subiendo y la condición es Normal. Es una cosa un poco rara.

Como otro ejemplo, supón que alguien esté haciendo una Fórmula de Peligro para el Subordinado. La persona hace el procedimiento paso a paso y escribe sus actos hostiles y ocultaciones y cualquier situación conocida de fuera-de-ética, comienza a aplicar la Fórmula de Peligro para la Primera Dinámica. Pero antes de que termine la fórmula, sus estadísticas suben. En realidad sería peligroso que esta persona no finalizara la Fórmula de Peligro (por ejemplo: llevar a cabo los pasos de la Fórmula de Peligro de: “Reorganiza tu vida” y “Formula y adopta una política firme”).

Que las estadísticas de uno suban antes de terminar una fórmula, no significa que uno no pueda entrar en la condición superior que ahora indican las estadísticas. Sin embargo, sería un gran error no terminar los pasos incompletos de una fórmula anterior. Así, en los ejemplos anteriores, se tiene que terminar la fórmula anterior, luego terminar la siguiente fórmula y continuar según le dicte su gráfica.

La terminación de una fórmula es sumamente vital. Uno no se limita a nombrar una fórmula. Hace que se termine.